Sus Majestades se pasearon ayer por las calles daimieleñas, pasando por casi todos los barrios daimieleños, transmitiendo la ilusión de una jornada cargada de nervios para los más pequeños de cada hogar de Daimiel.
Daimiel Noticias. – La ilusión ha vuelto a estar presente en los hogares daimieleños, pese a la también existencia de un coronavirus que sigue marcando el día a día. Este miércoles, los nervios previos se sucedieron dando paso a la apertura de regalos a los pies de puertas, árboles, belenes y rincones varios de las familias.
Ya el martes por la tarde, los más pequeños de la casa pudieron ver una cabalgata diferente con Melchor, Gaspar y Baltasar recorriendo más calles que nunca a su paso por Daimiel, acompañados de sus emisarios reales, y gracias a la asistencia de la Peña Equina Rocinante.
En la mayoría de los casos, visualizada desde sus balcones, ventanas y miradores. El objetivo de la delegación de Festejos fue evitar aglomeraciones y cumplir con lo establecido, pero sin restar esperanza a un recién estrenado año.
A partir de ahí, el reparto fue desigual. Hubo quienes se fueron a la cama ya con algunos presentes, mientras que, por lo general, el despertar marcó el Día de la Epifanía. Más pronto de lo habitual las emociones para descubrir qué se escondía tras los envoltorios estaban a flor de piel. Juguetes de todo tipo y tamaño, dispositivos variopintos, artículos de electrónica, del hogar, de perfumería, ropa, hogar y así hasta un largo etcétera dejaron a su paso por los domicilios los Reyes Magos de Oriente en 2021.
Un año más y como norma general, los hogares daimieleños disfrutan de una jornada cargada de regalos y del clásico roscón de reyes, y, en este año, del valor añadido de intangibles como la salud o de la posibilidad de compartirlos, eso sí, medidas de seguridad e higiene de por medio y siempre que sea permisible.
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