La concejala de Nuevas Tecnologías, Cruces Sánchez, anunciaba este nuevo reparto y la incorporación de otras cuatro impresoras 3D a este grupo de voluntarios. Sánchez agradecía su trabajo, el de las personas y organizaciones que han donado material, y de aquellas que ayudan a terminar las viseras. Esta última labor se encuentra a cargo de “las monjas carmelitas y las mínimas”, indicaba.