Su presidente, Ángel Bellón, insiste en que esa limitación de las extracciones “no soluciona el problema de los niveles freáticos del Alto Guadiana” y pide volver a las cifras anteriores a 2019. También defiende “el aporte de 10 hectómetros cúbicos desde el trasvase Tajo-Segura a las Tablas de Daimiel hasta que lleguen a un ciclo de lluvia”, y volver “a las acumulaciones entre familias”.
Daimiel Noticias. - La Comunidad de Usuarios de la Masa de Agua Subterránea de Mancha Occidental I votó en contra y mostró su rechazo al mantenimiento de las dotaciones para 2023 que aprobó a principios de semana la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG). Éstas siguen como el año pasado y son de 1.800 metros cúbicos por hectárea para herbáceos y 1.350 para leñosos.
Así lo ha recalcado en Radio Daimiel su presidente Ángel Bellón, y así volvió a quedar de manifiesto en la reunión que mantuvo la junta directiva de esta comunidad este pasado jueves. Bellón señalaba que su postura es volver a las cifras previas a 2019 y que esas dotaciones fueran de 2.000 metros para herbáceos y 1.500 para leñosos, es decir, revertir ese 10% de recorte.
A su juicio, esa reducción que mantiene la CHG “no soluciona el problema de los niveles freáticos del Alto Guadiana”. Su alternativa pasaría por “el aporte de 10 hectómetros cúbicos desde el trasvase Tajo-Segura o las Tablas de Daimiel hasta que lleguen a un ciclo de lluvia”, y también apuesta por “volver a las acumulaciones entre familias y tener un ahorro de aprovechamientos y sacar la misma agua, no más”.
Asimismo, condicionado a la “disponibilidad de recursos hídricos” en la cabecera del Tajo, cree que debería “haber aportes en un futuro de 50 hectómetros cúbicos para el uso agrario en el Alto Guadiana”, añadía Bellón.
Para ello, apelaba a que las administraciones pongan en marcha infraestructuras y “con un poco de agua que sobre en una cuenca se pueda trasvasar a otra, a donde más falta haga”, concluía.
Comentarios