Su portavoz, Lorenzo García-Muñoz, compartía la “desesperación” de muchos de estos empresarios y autónomos que “no saben si declararse en ERTE, enviar a sus trabajadores al paro o aguantar los costes fijos con sus establecimientos cerrados”.
A esa misma reclamación se sumaba el presidente de la asociación turística local, Jesús Pozuelo, quien pedía a todas las administraciones que saquen el dinero de “otras partidas no productivas y socialmente prescindibles”. Pozuelo advertía que la “indignación” en el sector va a más y que se sienten “desamparados”.
Daimiel Noticias. - “Ayudas directísimas sin condiciones y medidas preventivas menos drásticas”. La Asociación de Empresarios de Daimiel (AEDA) lo tiene claro cuando se le pregunta por la manera de minimizar el impacto que las medidas de nivel 3 reforzadas tendrán en la hostelería daimieleña a corto plazo y cómo evitar esta misma situación a largo plazo. Su portavoz, Lorenzo García-Muñoz, explicaba que la tarde del miércoles fue una sucesión de llamadas donde los gerentes de bares, restaurantes y pubs mezclaban indignación y desesperación por la situación que “de nuevo tienen que afrontar de un día para otro”.
García-Muñoz señalaba que con este cierre total de, al menos 10 días, muchos de ellos no saben cómo actuar para reducir el nuevo agujero en sus cuentas. Ante la imposibilidad, afirmaba, de acogerse a un cese de actividad como al inicio de la pandemia, “dudaban en activar un ERTE sin saber si el cierre es para solo 10 días y con los costes que eso supondría; si mantener los empleos y pagar los seguros sociales a sus trabajadores, o si hacer despedidos que, en algunos casos, dejarían a estos empleados sin ingresos porque han agotado su paro”, según indicaba el portavoz empresarial. Por todo ello, Lorenzo García-Muñoz reclamaba a las administraciones que pongan en marcha “ayudas directas y ayudas importantes sin ningún criterio añadido” para que el sector se mantenga y “no se pierdan más empleos”.
En este análisis, el portavoz de AEDA valoraba “la flexibilidad” que los propietarios están teniendo por regla general “con los alquileres” de locales hosteleros, pero, consideraba, que, sin una mejor planificación de estas medidas, la pérdida de ingresos va a hacer muy complicada la continuidad de muchos de estos negocios. Así, reclamaba a los dirigentes políticos que tomen estas decisiones manera preventiva para que sean más graduales, es decir, “reducciones de aforo o de horarios” durante más tiempo que eviten estos cierres completos. “Está claro que eso no nos gusta a nadie y que tiene un coste político o electoral” si la situación de la pandemia se mantiene estable. Pero, apostillaba, “igual así estas medidas serían menos drásticas y dolorosas” y “podríamos aguantar mejor a nivel sanitario y político”, concluía.
Por otro lado, García-Muñoz aclaraba que las medidas adoptadas para los centros y superficies comerciales no afectarán a Daimiel porque “el 99% de los negocios son pequeños comercios”. Algo que valoraba especialmente ante el inicio de las rebajas en muchos de ellos, una época clave para su supervivencia y para la economía local.
“Estamos desamparados”
A esa misma reclamación de ayudas se sumaba el presidente de la asociación turística local, Jesús Pozuelo que, a través de sus redes sociales y en Radio Daimiel, pedía que fueran “ayudas de verdad, no lo que nos están vendiendo ahora”, y, añadía, que “si hay que recortar en otras partidas, que se recorte”.
Pozuelo señala que el turismo y la hostelería “se están hundiendo por la irresponsabilidad de muchos”, y pide que si las administraciones no pueden ayudarles cómo necesitan, que eliminen “partidas no productivas y socialmente prescindibles”. “Estamos desamparados” por todas las administraciones, y advertía que dentro del sector “la gente está cada vez más enfadada, no se entiende que se cierre sin que nos ayude, y el ambiente se está caldeando y no sabemos hasta donde llegará”.
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