El arbitro daimieleño de Primera División ha agradecido que el Gobierno de Castilla-La Mancha haya decidido premiar por primera vez a los árbitros en sus distinciones anuales al Mérito Deportivo, y que él sea uno de los distinguidos. “Los árbitros no ganamos campeonatos, pero nos sentimos como unos deportistas más”, comentaba.
Daimiel Noticias.– El árbitro daimieleño Isidro Díaz de Mera ha agradecido al Gobierno de Castilla-La Mancha que haya decidido premiar por primera vez a los árbitros en sus distinciones anuales al Mérito Deportivo, y que en ese estreno él sea uno de los dos distinguidos.
“Es un orgullo que el Gobierno regional se acuerde de nosotros porque, aunque no competimos ni ganamos campeonatos, nos sentimos como unos deportistas más”, comentaba en declaraciones a Radio Daimiel.
No obstante, ser uno de los actuales 20 árbitros de la Primera División masculina del fútbol nacional está al alcance de un porcentaje muy reducido de colegiados. En estos momentos, en Castilla-La Mancha hay “más de 850 árbitros y solo dos estamos en Primera”, él y Javier Alberola Rojas.
En su tercera temporada en la élite profesional del arbitraje español, Díaz de Mera señala que la cualidad más importante para ser un buen árbitro es “la rapidez y la seguridad en la toma de decisiones” sobre el terreno de juego. “En un segundo tienes que decidir sobre una acción que puede cambiar el resultado de partido”, y eso, aunque ahora se cuenta con el apoyo tecnológico del VAR, requiere de una preparación mental y física óptima.
“Se puede trabajar y mejorar con la experiencia, con los partidos que vas acumulando, pero es clave estar físicamente bien. Si estás cerca de la jugada, lo mejor colocado posible, es más fácil tomar esas decisiones y no equivocarse”, explica.
Aunque ya ha actuado como cuarto árbitro en partidos de la fase previa d la Champions League, Díaz de Mera todavía no forma parte de la nómina de los árbitros españoles que pueden pintar como principal en partidos internacionales.
Reconoce que eso “sería un sueño, pero por ahora no sabe si está más cerca o más lejos de conseguirlo que a principios de la temporada. “Nosotros no tenemos una clasificación durante el año que nos diga, como a los equipos, si estamos para entrar en Europa. Tenemos una evaluación después de cada partido, pero no la podemos comparar con la de los compañeros. Hay que esperar al final de la temporada”, explica.
Esa “escarapela internacional”, como le gusta decir a los árbitros, le colocaría en otro nivel todavía más exclusivo y con posibilidades de dirigir competiciones por equipos o de selecciones nacionales.
Por ahora, lo más inmediato en su agenda será recibir este viernes 17 de marzo en el teatro Buero Vallejo de Guadalajara el premio que le ha otorgado el Gobierno regional, y que recogerá personalmente. “Allí estaré con el resto de premiados”, concluía.
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