El centro de interpretación abre sus puertas otorgándole un contenido mayor y más diversificado profundizando en el agua, en aspectos volcánicos y otros tantos más que se conocen a través de distintos paneles y escenificaciones que permiten entender el término municipal, su historia y patrimonio dentro de una secuencia cronológica hasta llegar a la ciudad que hoy en día es Daimiel.
Daimiel Noticias. - El hasta ahora conocido como Centro de Interpretación del Agua (CIDAHM) ha transformado su interior actualizando sus contenidos, ampliándolos y con una configuración distinta a la existente. Un giro donde el espacio recoge mediante grandes paneles dotados de elementos gráficos, la relación entre hombre, tierra y agua dentro del marco geográfico e histórico de Daimiel y sin olvidar la necesidad del equilibrio de los ecosistemas para la permanencia del planeta. El proyecto ha sido posible gracias a una subvención de 103.000 euros, procedentes de Organismo Autónomo Parques Nacionales, y ha respetado el edificio de los años 50 de Fisac que también alberga la delegación de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Daimiel.
El alcalde, Leopoldo Sierra, procedió a la inauguración oficial, acompañado de gran parte de la Corporación Municipal. El primer edil abordó este nuevo concepto del hasta ahora conocido como Centro del Agua. Sierra explicó que este espacio “hace un repaso de la historia de un municipio tan importante como es el municipio de Daimiel”. Una renovación que permite, dijo, ser un punto de referencia para el turista de interior. La inversión contribuye a “seguir fomentando la imagen del municipio”, consideró, a través de perspectivas diferentes entre las que se incluye el patrimonio cultural, gastronómico y de naturaleza, entre otros. Es una propuesta “integral” y “didáctica” pensada para descubrir el significado de Daimiel, su historia y sus “potencial”, concluyó.
En este innovador diseño interno se combinan múltiples elementos en torno al agua. Allí aparece la Motilla del Azuer, el Museo Comarcal, el espacio geológico mar de la Nava o Las Tiñosas. Se compone así una secuencia para entender el término municipal, su patrimonio material e inmaterial de forma cronológica hasta el legado actual. Una visita didáctica, con indicadores informativos, donde también se cuela una ‘bruja’ que representa a la relación de Daimiel con éstas, a raíz del procesamiento por la Inquisición a seis mujeres entre los siglos XV y XVI acusadas de brujería. Del mismo modo, llama la atención la Visita Virtual a la Motilla que se ha trasladado hasta allí justo en el espacio donde se puede conocer el Daimiel más actual, las costumbres populares que le identifican y sus valores patrimoniales, religiosos y civiles, gastronómicos y sociales.
En los 290 metros sobre los que se asienta SAVIA, se aborda el ciclo del agua desde perspectivas paleoecológicas, geológicas, históricas, humanas y con mirando también al futuro con una galería donde se recogen ríos cruciales para el desarrollo de la vida en esta tierra como son el Guadiana y el Azuer.
Ese es el primer viaje, un bloque, a partir del cual se atraviesa un bosque de columnas de separación volcánica sobre un lecho de lava. A partir de ahí, se presentan los procesos que formaron este territorio, el mapa del agua de Daimiel, paisajes, crisis climáticas con sequías e inundaciones y antropización. La Edad del Bronce, la Edad del Hierro, Roma, el Mundo Visigodo, la Edad Media, Edad Moderna, la Edad Contemporánea y el siglo XXI son hilos históricos conductores.
Un itinerario donde SAVIA contempla la mirada al Parque Nacional Tablas de Daimiel, sus características principales y también aquellas que plantean reflexiones sobre el agua y su futuro, para poner en valor la sostenibilidad. Son curiosidades y múltiples fundamentos que se integran en el totalmente renovado centro de interpretación, dispuesto para dar a conocer otras tantas realidades más de Daimiel, comprobar su atractivo y despertar el interés del visitante.
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