Ayuntamiento de Daimiel

Ha encontrado 93 partidas bautismales en las parroquias de Santa María y San Pedro con referencias a esta práctica totalmente normalizada, y con características similares a la que ocurría en poblaciones del entorno. La joven daimieleña María Molina y el veterano Juan Vidal completaron la segunda ronda de ponencias de las VII Jornadas de Historia.

Daimiel Noticias.– La segunda ronda de ponencias de las VII Jornadas de Historia sobre Daimiel comenzó este viernes con una investigación sobre la esclavitud registrada en la localidad entre los siglos XVI y XVII. Un tema inédito en la trayectoria de estas jornadas y que ha sacado a luz José Manuel López López, tras escudriñar las partidas bautismales de las parroquias de Santa María y San Pedro de esos doscientos años

Esta ha sido la principal fuente que ha utilizado López, que también ha completado su trabajo comparando lo sucedido en Daimiel con lo aconteció entonces en poblaciones como Ciudad Real, Almagro o Villarrubia de los Ojos. 

El patrón coincide con ese entorno más cercano y con lo que ocurrió en el resto de los reinos de la época. “En su mayoría eran esclavas que, por las descripciones de la morena o la negra que recogen las partidas de las parroquias, podemos intuir que eran de origen musulmán”, señalaba.

López explicó que seguramente fueran cobradas como botín de las guerras del momento. Otro grupo de esclavos estaría relacionado con el pago de deudas y un tercero, como se refleja también en los archivos parroquiales, serían los hijos de las esclavas que, en la mayoría de los casos, formaban parte del servicio doméstico.

“No se usaban para trabajos duros en el campo, se consideraban más como un signo de distinción social de sus amos”, indicó López. Éstos eran nobles con apellidos como los Oviedo y los Carrillo, que en esa época “tenían calles con su nombre en Daimiel”. El clero también participaba de esa práctica ya que “esta plenamente aceptada, incluso por la iglesia, que solo ponía objeciones al maltrato de los esclavos”.

En total, José Manuel ha encontrado 93 partidas bautismales con referencias a esclavos, 80 de ellas entre 1537 y 1600. Por parroquias, Santa María registra 70 y San Pedro 23, una distribución lógica teniendo en cuenta que esta segunda parroquia acabó de construirse a finales del siglo XVI.  

Patrimonio religioso y pioneros educativos  
A continuación, expuso la joven daimieleña Marta Molina García-Pozuelo, estudiante del último curso del grado de Geografía y debutante en estas jornadas.

Molina presentó un trabajo que “empezó como parte de una asignatura en la universidad” y ha servido para una investigación sobre la gestión y la conservación de la parroquia de Santa María y de su entorno como Bien de Interés Cultural (BIC). Molina basó su análisis en la aplicación de la ley de 1985 del Patrimonio Histórico Español, y destacó la conservación del templo y la conciencia que Daimiel tiene sobre su patrimonio cultural.

Y de otra ley que duró 113 años habló Juan Vidal Gago para cerrar la jornada. Se remontó a la llamada ley Moyano, la ley educativa promulgada en 1857 durante el Bienio Progresista y cuyas líneas fundamentales pervivieron, con diferentes adaptaciones, hasta la Ley General de Educación de 1970. Desde entonces, “se han sucedido ochos leyes diferentes”, recordó Vidal.

Este marco legislativo es el que sirvió de referencia para hablar de los pioneros de la Educación Infantil (de 3 a 6 años) en Daimiel, entre el último tercio del siglo XIX y hasta la Guerra Civil. Un impulso a la alfabetización donde el Ayuntamiento de Daimiel colaboró “a veces con racanería y otras con generosidad”, y de la que destacó algunos nombres propios que todavía perviven en el callejero de Daimiel.

Es el caso de Rafaela Clemente, la calle del Mercado Municipal y de la fachada principal del actual museo, al que se accede por la calle Luis Ruiz Valdepeñas, antiguamente Aquilino Corrales, otro maestro de aquella época, reseñó.