Se trata de un simbólico lazo rosa de 20 metros de largo elaborado con cerca de 500 pequeños cuadrados de ganchillo, que ha llegado a Daimiel para conmemorar el ‘Día internacional de la lucha contra el cáncer de mama’. Su presidenta, la daimieleña Sonia Marchán, ha reclamado más apoyo con fondos públicos y privados para la prevención, seguimiento y tratamiento de la enfermedad, así como la vuelta cuanto antes a la normalidad asistencial, y, sobre todo, que se humanice la ayuda sanitaria que se recibe en las fases más críticas.