La ermita del Cristo de la Luz acogió durante la tarde del sábado la celebración en honor a los 26 pasionistas asesinados durante la Guerra Civil. La eucaristía fue presidida por el obispo Gerardo Melgar, que además de rezar por los religiosos, celebró el 300 aniversario de la orden. Acompañando en esta cita estuvieron el alcalde, Leopoldo Sierra, junto a varios miembros de la Corporación.
Daimiel Noticias.– El patio de la ermita del Cristo de la Luz acogió durante la tarde del sábado la eucaristía en honor a la Fiesta de los Beatos Mártires Pasionistas. Más de un centenar de personas acudieron a la misa, presidida por el obispo de Ciudad Real. Gerardo Melgar nombró a los 26 mártires asesinados en la Guerra Civil como “testigos valientes por mantener su fidelidad hasta el final”
Más de la mitad de los religiosos eran originarios de Palencia. El obispo se mostró sorprendido “al ser palentino como esos 14 sacerdotes que dieron su sangre por Cristo”. Los mártires “dieron su vida por amor al Evangelio” y Melgar manifestó que “la Iglesia Católica también necesita de testigos valientes de la fe para llevar el mensaje salvador al corazón del mundo”. Ser creyente en pleno siglo XXI no tiene “atractivo ni prestigio” para muchas personas. Por ello, el obispo pidió a los feligreses “manifestar la fe en palabra y hecho”.
La eucaristía no solo conmemoró a los religiosos, Melgar también celebró el 300 aniversario de la orden de los Pasionistas. Esta celebración inicio sus actos el 22 de noviembre de 2020 y los finalizará el 1 de enero de 2022.
El alcalde de la localidad, Leopoldo Sierra y otros miembros de la Corporación presenciaron el último día de celebración a los Beatos. Sierra destacó que la vigilia del viernes fue muy emotiva “a pesar de no haber novicios para beatificar”. El primer edil agradeció al obispo Melgar por “acompañar a los beatos en un día muy especial para ellos”.
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