Ayuntamiento de Daimiel

Las elecciones llevadas a cabo durante la tarde del sábado finalizaron con 101 votos para Vicente Gómez Limón y 181 para el recién nombrado presidente. En total, fueron casi 300 hermanos los que quisieron sumarse a estas votaciones llevadas a cabo en el centro pastoral ‘Josefinas’.

Daimiel Noticias.– La hermandad de la Virgen de las Cruces tiene nuevo presidente. Manuel Vicente López de la Nieta fue elegido durante la tarde del sábado tras unas votaciones a las que quisieron sumarse 291 hermanos y hermanas. Tras el recuento de votos, se contaron 101 para Vicente Gómez Limón y 181 votos para Manuel Vicente López de la Nieta. Así lo dio a conocer el presidente saliente, Paulino García de la Camacha, que antes de ceder el cargo, quiso agradecer a las juntas directivas que le han acompañado durante estos años, a toda la gente que ha confiado en él y deseó lo mejor para el nuevo equipo elegido.

Por su parte, Manuel Vicente López de la Nieta recogió el testigo agradeciendo a todos los hermanos y hermanas que fueron a votar su participación, y a su nueva junta directiva, aún sin cerrar, que se unan a su proyecto. Entre los nombres que la conformarán avanzó los de Vicente Noblejas Negrillo, Ángel Molina, José Miguel Ruiz de la Hermosa, Carmen Naranjo, María de la Cruces Espinosa, Miguel García de León y Ana Ruiz de la Hermosa.

López de la Nieta reconoció que “sin duda un gran reto para estos cuatro años, pero –añadió-lo hacemos con ánimo y entusiasmo”. “Estamos en una hermandad religiosa y quiero como futuro presidente de la hermandad de Nuestra Señora de las Cruces que las personas y el tiempo vayan unidos para cada vez sumar más cristianos comprometidos con la iglesia sin temor a que nadie nos pueda señalar”, manifestaba el nuevo presidente.

También reconoció que “tenemos muchos proyectos en la cabeza en los que a partir del lunes empezaremos a trabajar”. En ese sentido adelantó que una de las ideas que quieren plasmar próximamente es la construcción de un monumento en el cruce de la carretera de Malagón con la desviación “en conmemoración de los quintos, mozos y mozas, y reconocimiento al esfuerzo que realiza el pueblo de Daimiel que no deja nunca sola a la patrona”.

Finalmente, pidió a la Virgen de las Cruces que “acreciente nuestra fe y que sea nuestro motor para vivir en esta etapa con entusiasmo y energía renovadas”.