Con el fin de preservar las condiciones de seguridad, salubridad y decoro, el Ayuntamiento de Daimiel ha lanzado el habitual bando anual por el cual todas las personas que posean un solar, parcela urbanística o rústica tendrán la obligación de desbrozarlos, limpiarlos y adecentarlos antes del 31 de mayo. De no ser así, podrán estar expuestos a una sanción y deberán pagar el coste de la tarea, que será llevada a cabo por trabajadores municipales.
Daimiel Noticias. – El Ayuntamiento de Daimiel ha publicado su habitual bando anual por el cual todos los propietarios de solares, y de todas las parcelas urbanas y rústicas del municipio habrán de realizar las tareas de desbroce, limpieza y adecentamiento de estos antes del próximo 31 de mayo.
Tal y como refleja el escrito, “esta actuación deberá realizarse con la periodicidad necesaria a fin de mantenerlos durante todo el año en las debidas condiciones de seguridad, salubridad y ornato público”.
El concejal de Obras, Jesús Javier Villar, ha comentado en la rueda de prensa celebrada el miércoles, que estas labores podrán ser con medios manuales o mecánicos, y los restos serán retirados de las parcelas para entregarse al gestor de residuos autorizados, ya que la eliminación mediante fuego está prohibida.
Además, “los deshechos propios del desbroce se depositarán en el leñero municipal ubicado frente al parque de bomberos”, informaba. En cambio, los residuos sólidos o escombros tendrán que llevarse a los puntos autorizados.
El edil ha indicado que los propietarios serán responsables de los daños que provoquen en su entorno. En el caso de incumplimiento de este bando por parte de los titulares, el Ayuntamiento, procederá a acondicionar los terrenos que lo precisen, pero no le saldrá gratis a la propiedad: “Lo que resultará para el propietario es el pago de los costos de ejecución, además de los expedientes sancionadores que fueran oportunos”, aclaró.
Villar ha mencionado que fruto de las lluvias de las últimas semanas, “las malas hierbas crecen rápido” por lo que ha instado a los propietarios a cumplir con el bando y “contribuir, entre otros, a una mejor convivencia”.
En este sentido, el concejal ha insistido en la importancia de estas labores ya que estos terrenos sin tratar, aparte de ser una mala imagen para el pueblo, acaban siendo en un foco de atracción de insectos, pequeños roedores y reptiles que causan molestias a los vecinos colindantes, así como un riesgo de incendio en época estival
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