El alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra, destaca el carácter solidario y el sentido de unión de los daimieleños; rasgos que se han evidenciado aún más durante el estado de alarma y confinamiento originado por la pandemia por covid-19. En el balance anual desde que tomara cargo como regidor del municipio por tercer mandato consecutivo, el primer edil resalta “las ganas de trabajar, la capacidad y las garantías” de los ediles que integran su último equipo de Gobierno.
Daimiel Noticias. – “Daimiel ha demostrado que es un pueblo solidario y que sabe hacer frente a situaciones críticas y trabajar en conjunto”. Con esa contundencia se ha expresado el alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra, en su balance del año político, marcado desde mediados de marzo por el decreto de estado de alarma por la covid-19. El primer edil considera que su municipio es un “referente en altruismo”, cuestión que se ha evidenciado aun más durante la pandemia con múltiples gestos emprendidos por ongs, hermandades, asociaciones y otros tantos voluntarios más que se unieron a la oleada de ayuda redirigida a proporcionar los medios necesarios para el desarrollo seguro de las funciones de sanitarios, sociosanitarios y personal “esencial” durante ese tiempo.
Casi la totalidad de ese abastecimiento y servicios se ha canalizado a través del propio consistorio en iniciativas como la desinfección vial del colectivo de agricultores, la elaboración de mascarillas de tela por varios grupos de costureras, las piezas y propias viseras elaboradas por el movimiento Makers Daimiel. Son algunos de los ejemplos que subían a un carro de iniciativas entre las que se colaban las felicitaciones infantiles a los niños que cumplían años en alguno de los 98 días de confinamiento promovidas desde las delegaciones de Infancia y Juventud sobre las que hacía memoria Sierra. El primer edil también aludía a la labor desarrollada por esenciales como Policía Local, Protección Civil, Guardia Civil, profesionales del Cementerio Municipal, así como la de profesionales de sectores como la alimentación y el transporte.
En el debe coloca la “falta de información desde entonces y hasta el día de hoy” por parte de las autoridades sanitarias que han obligado a remitirse al número de sepelios cuantificado en 120 desde el 16 de marzo al 31 de mayo en el cementerio municipal. Por encima de las cifras, Leopoldo Sierra sitúa las pérdidas de amigos y vecinos de Daimiel cuyos familiares le han transmitido sensaciones y situaciones “auténticamente dolorosas” y que, comenta, “son difíciles de olvidar”.
En ese análisis, el regidor daimieleño destaca la “responsabilidad” generalizada durante la desescalada y el propio confinamiento que, afirma, “se llevó a rajatabla”. En ese sentido, pidió continuar con esa actitud de distancias, mascarillas e higiene para evitar contagios “protegiéndonos a nosotros para proteger al resto”, insistió. Una persistencia que extendió a otros ámbitos, como ya he hecho en ocasiones anteriores, de la realización de test.
En cuanto a la gestión municipal, Sierra considera que se han ido consensuando las decisiones con el objetivo de ir siempre buscando el “equilibrio” y permitir, por otro lado, la reactivación económica. Sin embargo, echó en falta protocolos más específicos para los ayuntamientos en determinadas actividades donde se precisen la forma de actuar conforme a cada circunstancia. En esa línea, el ayuntamiento daimieleño se ha visto obligado a cancelar sus festejos patronales del 1 al 5 de septiembre para así evitar grandes aglomeraciones y que prevalezca la seguridad ciudadana por encima de todo.
Mensaje a los jóvenes
Una vez hecho público en anuncio de la anulación de la Feria 2020, Sierra confirma por otro lado la apertura del complejo de piscinas de verano a partir del 1 de julio bajo estrictas medidas de seguridad y reducción de aforo. Igualmente se trabaja en la apertura de cine de verano, aunque aun no está totalmente definida la forma de llevarla a cabo. Una intención sobre la que se está trabajando, al igual que en un probable proyecto de conciliación (actualmente en fase de licitación).
Los niños y los jóvenes y su ocio son una preocupación constante para la administración local, pero también lo es su comportamiento social. Por eso, Sierra se muestra tajante: “Que ese trabajo familiar que se hace, no se tire por tierra”. Con estas palabras, el alcalde pide responsabilidad, especialmente en perfiles más jóvenes, para evitar llevar el contagio a padres y abuelos en los domicilios. Y, aunque reconoce que es necesario el esparcimiento, reclamaba respeto por las medidas remachando que “la realidad del coronavirus ha sido dura y dramática y no podemos permitir que vuelva”.
Balance primer año del tercer mandato de Sierra
Los últimos días de la Fase 3 de la desescalada se cruzaron con el aniversario (15 de junio de 2019) de la constitución de la última Corporación Municipal. Entonces, Sierra renovaba su tercer mandato como alcalde y se rodeaba de un “equipo renovado e ilusionado”. Y prosigue, “en esa línea estamos”. Por eso, en su balance del curso político felicitaba la labor de sus compañeros en el gobierno local y, aunque el coronavirus ha supuesto un “freno” a los proyectos en perspectiva para este mandato, les reconocía sus “ganas de trabajar, capacidad y calidad para el desarrollo de sus respectivas carteras municipales”. Delegaciones asociadas a unos presupuestos presentados en mayo adaptados a las necesidades actuales marcadas por el coronavirus y basadas en dos aspectos estratégicos: Proteccion Social e Impulso económico. “Son pasos hacia adelante con el objetivo de incentivar la economía”, explica.
Del mismo modo, Leopoldo Sierra aboga por el apoyo al pequeño comercio y las compras en el municipio. Un análisis donde, entre tanto, glosó otras acciones promovidas en el curso político como el Plan de Igualdad y proyectos de mejoras. En este último apéndice citó aquellos que se están acometiendo el teatro Ayala, pabellón cubierto o cementerio municipal. Del mismo modo, avanzó la inminente apertura de la Motilla del Azuer.
Sierra explicó que ahora mismo el Ayuntamiento está tirando de planes de empleo de 2019, a falta de conocer los movimientos del ejecutivo autonómico de cara al ejercicio en curso y donde las administraciones locales los acogen asumiendo el 20% de su financiación. Una vez se conozca, decía, se pondrán en funcionamiento, bien con esa fórmula, o bien, mediante planes propios. Del mismo, anunció que la JCCM ha suspendido el taller de empleo ‘Entremaderas’, lo cual, informó, deja en el aire a casi 40 familias que se beneficiarían de ese programa y del de Zonas Rurales Deprimidas.
Una eventualidad que contrasta con la ayuda de la Diputación que Sierra reconocía y que supondrá 94.000 euros para unas arcas municipales muy necesitadas de financiación de cara a afrontar gastos habituales a los que se suman los no previstos por el covid-19 como mascarillas, geles, mamparas de separación y otras tantas mejoras y medidas obligatorias en el funcionamiento de los servicios que proporciona el Ayuntamiento de Daimiel.
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