Este miércoles ha entrado en vigor en Castilla-La Mancha la obligatoriedad del uso de mascarilla para hacer frente a la crisis ocasionada por la COVID-19, incluyendo excepciones como el ejercicio del deporte, los establecimientos y servicios de hostelería y restauración o las piscinas y zonas de baño. La Policía Local de Daimiel confía en la concienciación de los vecinos y en el correcto uso de la mascarilla para evitar posibles sanciones por infracciones.