Su presidente, Esteban Esquinas, advirtió que, sin aportes de agua, los episodios de incendio de turbas “podrían producirse a principios de verano”. Una derivación de 20 hectómetros cúbicos procedentes del Tajo-Segura a través de la Conducción a la Llanura Manchega garantizaría el mantenimiento de los procesos ecológicos esenciales del Parque Nacional, tal y como establece el PRUG. La reunión se celebró este jueves en el Centro del Agua.