El presidente de ASAJA Daimiel destaca que los agricultores estuvieron en las calles para protestar por su situación y ahora lo han hecho para “colaborar desinteresadamente” en las labores de desinfección. Pide que se compren productos de alimentación españoles. También señala que no ha habido problemas para encontrar mano de obra en estos dos meses, y tilda de “sorpresa desagradable” la activación de los pozos de recarga en Las Tablas.
Daimiel Noticias.– Los agricultores daimieleños han tenido un papel clave durante la declaración del estado de alarma. Los tractores que en febrero y principios de marzo se dejaron ver en las autovías para protestar así por la situación del sector cambiaron las pancartas por los aperos que han ayudado a la desinfección de calles y espacios públicos. En Daimiel, como en muchos otros puntos del país, se pusieron a disposición del ayuntamiento, y durante muchos días han completado sus jornadas de trabajo con esta labor altruista. “Lo mismo que reivindicamos, también colaboramos desinteresadamente”, destacaba Ramón Ruiz de la Hermosa. El presidente de ASAJA en Daimiel subrayaba que esta implicación debería ser tomada como ejemplo “por los políticos de arriba”.
Solidaridad que se ha compaginado con unas tareas que no han parado ni los fines de semana porque “el campo no se puede gestionar por teleconferencia”. En este sentido, Ruiz de la Hermosa esperaba que la situación provocado por el coronavirus haya servido para que la sociedad se dé cuenta de la importancia del sector primario, al que unía también la labor de los transportistas en el mantenimiento del abastecimiento alimentario en las tiendas. “A ellos habría que ponerles una gran medalla”, señalaba.
Por todo ello, el presidente de ASAJA pedía a los consumidores que, en estos tiempos de crisis que vamos a atravesar, primen en sus compras los productos españoles y echen al carrito la fruta, verdura, la carne y el pescado cuyo código de barras “empiece por 84”.
Ruiz de la Hermosa comentaba que durante estos dos meses se ha trabajado como siempre en el campo y “los cultivos están en marcha, las cebollas se han plantado y las viñas están condiciones”. En este punto, el presidente de ASAJA ha indicado que estas labores no han tenido problemas en encontrar mano de obra gracias a la cantidad de temporeros que están empadronados en Bolaños y que se han encargado de la plantación de los productos frutihortícolas, como la cebolla, el melón o la sandía.
Las dificultades podrían llegar a partir de junio y en los siguientes meses de verano cuando hagan faltan temporeros para la recogida de todas estas campañas a las que, luego, se le sumará la vendimia en vaso. Esto no afectará a Daimiel, cuya producción está casi toda en espaldera, pero sí puede complicar la recogida a muchos pueblos vecinos donde todavía se vendimia a mano en muchas parcelas.
Por último, el presidente de ASAJA, en consonancia con lo que ha expresado la Masa de Agua Subterránea Mancha Occidental I, ha criticado con dureza la activación de los pozos de recarga que han encharcado alrededor de 300 hectáreas del Parque Nacional de Las Tablas. Ruiz de la Hermosa apuntaba con ironía que “las hemos dejado muy hermosas”, a la vez que, según sus estimaciones, “le hemos metido un chupetón de un metro al acuífero”. En su opinión, los pozos se proyectaron para “situaciones más urgentes como los incendios” de turba, y entendía que la medida ideal para “recuperar el parque” hubiera sido un trasvase por la tubería a la Llanura Manchega.
Tras esta “sorpresa desagradable”, Ruiz de la Hermosa vaticinaba que ahora llegarán “sanciones al sector agrario” por sus regadíos cuando, según su criterio, es el que “menos culpa tiene”. Responsabilidad que trasladaba “a los que gestionan” y no a “los que siempre estamos en boca de muchos cuando nuestro trabajo es darle de comer a todos”.
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